CARTA A LOS VECINOS Y VECINAS
Queridos vecinos y vecinas:
No quiero dejar pasar estas fechas sin dedicaros unas palabras.
Hemos atravesado momentos muy duros y el año no ha sido especialmente fácil.
Un recuerdo entrañable para las mujeres y los hombres que nos han dejado que nos llena de nostalgia y a la vez de gratitud, por haber compartido momentos inolvidables con ellas y ellos. Que estas Fiestas sean una oportunidad para valorar su enorme legado.
La vida nos enseña cada día que somos muy poca cosa y deberíamos de aprender que el tiempo que dediquemos a los demás nunca será un tiempo vacío.
Somos el ejemplo de lo que hacemos, pensar en los demás y dedicarles pequeños momentos de nuestra vida es el impulso que necesitamos para seguir avanzando y sobrellevar los problemas de cada día.
Aún no he encontrado la respuesta de por qué a los seres humanos nos cuesta tanto comunicarnos.
El único que esta sólo es el que cierra su corazón, “intentemos no cerrarlo y mirar hacia el que sufre tendiéndole nuestra mano”.
Refugiemos nuestros sueños para que no se mueran de frío y pensemos que la vida es demasiado corta para malgastarla en ofendernos permanentemente.
No olvidemos que la peor soledad es la que llevamos dentro.
Terminamos el año con una triste noticia, el día 31 cerró la Panadería de Senra. En nombre de la Corporación Municipal, de las Juntas Vecinales, de las vecinas y vecinos, y en el mío propio, queremos manifestarle a Manolo y su familia, nuestro agradecimiento y reconocimiento por su buena disposición, por la atención y labor solidaria con las personas que habitan estos pueblos, no sólo durante la pandemia, sino a lo largo de toda una vida, de varias generaciones, que se remonta a casi cien años. Gracias desde el Corazón
“Acompañarnos y escucharnos, con eso basta”, este es mi mensaje y el de la Corporación Municipal a la que represento, para el Nuevo Año.
La Alcaldesa
Mª Carmen Mallo Álvarez
